martes, 8 de septiembre de 2015

La razón por la cual decido esperarte, amor de mi vida


Empezare a decirte que probablemente sea una de las últimas románticas, de aquellas que están en peligro de extinción, y que todavía guardan ilusiones y creen en el amor; de aquellas que todavía creen en esperar por ese alguien especial que te recordará constantemente lo única y valiosa que eres, ya que para él eres extraordinaria, a pesar de todo, de tus defectos y manías.


Futuro amor de mi vida, te quiero decir que decido esperar por ti, porque soy consciente de lo que merezco, y sé que tú lo vas a valer.


Te quiero explicar porque decido esperar por ti, pasando mis días mejorando mi relación conmigo misma, en vez de requerir la compañía de otra persona para que me ayude a matar la soledad que se suele acentuar en lo cotidiano de los días.  


Decido esperar por mí, por ti, por ese algún día que estés a mi lado, porque sé que, así como tú, yo también merezco un amor de verdad, un amor que me acepte tal y como soy, queriendo mis risas y cualidades, pero sobre todo amando mis fantasmas, mis dudas y mis miedos.


Decido esperar por un amor, que me recuerde día a día la belleza de la vida, un amor que me haga sentir que conmigo todo lo puede y que conmigo todo lo quiere.

Amor, decido esperar por ti, porque sé, que aunque todavía no tengo la certeza de quien eres o de donde estarás, sé que andas por allí, y que solo tú serás mi lugar favorito.


Decido esperar por ti, porque no quiero  apresurarme, no quiero estar con alguien simplemente por la  necesidad de sentir aprecio, la necesidad de compañía, por el bendito e inexplicable miedo a la soledad, o peor aún, por costumbre. No se puede jugar con los sentimientos de las personas, y sé que una relación así, nunca sería suficiente para mí. 


Decido esperar por ti, porque creo firmemente en un amor intenso, gobernado por la ternura y admiración;  porque en la actualidad han minimizado abismalmente el significado de la palabra amor; y quiero reservar esas 5 letras para ti, solo para ti; porque el día que decida decirlas, porque el día que mi corazón las sienta de verdad, te sostenga de la mano y te mire a los ojos, sonría y te lo diga; créeme que serán las palabras más sinceras que oirás, no suelo decir cosas que no creo, y mucho menos que no sienta.  Y te aseguro que no serán suficientes para demostrar todo el amor que te tendré.


Contigo quiero aprender el verdadero significado de amar, y todo lo que eso implica. Quiero echarme a tu lado y hablar contigo, sobre ti, sobre lo que fuiste, lo que eres y lo que deseas ser. Quiero saber tus mayores anhelos, tus mayores sueños, tus mayores ilusiones y ser parte de tus mayores alegrías, y con el pasar de los días, estar de tu lado, y ayudarte a cumplir todas tus metas.

Quiero explicarte todo lo que soy, todo lo que fui y todo lo que quiero ser, y así poco a poco, tú mismo vayas descubriéndome. Quiero mostrarte quien soy, con mis dilemas, con mis miedos, con mis fracasos, con mis logros, y sobre todo, quiero tener la libertad de poder mostrarte mi complejidad.


También quiero que sepas, que tengo un grandísimo interés en escuchar todos tus miedos, todas tus decepciones, todo lo que alguna vez te causo una lágrima, para así, beso a beso ir borrando tus marcas, esas que no dejan huellas en la piel y solo en el alma, y cambiarlas por instantes de felicidad.

Por si alguna vez lo dudas, también estaré allí para llorar contigo y tomar tu mano si la ocasión lo requiere, por experiencia propia, sé muy bien, lo difícil que es, por lo menos para mí, mostrar mis debilidades, lo difícil que es abrir mi alma, mi mente, mi espíritu, y mostrarte lo vulnerable que soy, a pesar de la fuerte que aparento ser. Precisamente quiero eso, que me conozcas y conocerte de verdad, sin facetas, sin restricciones, sin roles que cumplir.


Quiero que me muestres tu lado malo, ese que crees que no inspira amor, ese que crees que no debes mostrar por temor, quiero que sepas que amare hasta tu sombra, ya que amar implica aceptar, y aceptaré quien eres, ya que para mí, esa es la única manera de amar.

Quiero que me quieras por lo que soy, por como soy, por mi manera de reír cuando nadie me ve, por mis libros, mis metas, mis pasiones y sobre todo, por todo aquello que ni yo misma acepto.


Y sabes, te digo todo esto, porque para que algún día, yo llegue a llamarte amor, es porque inesperadamente has logrado llegar a mí, y habrás llegado a esquivar los grandes muros que resguardan a mi corazón, a mi mente. Y con toda sinceridad, amor, se lo difícil que puede llegar a ser, sobre todo con alguien como yo, que tiene tantas facetas, a veces tan tierna y otras tan fría, a veces tan indestructible y otras tan vulnerable. Y si lograste llegar tan lejos, amor, definitivamente eres lo que tanto esperaba, y por eso te diré con una sonrisa, que definitivamente valió esperar por ti, esperar por un amor así.